Continuamos la ruta que iniciamos la pasada semana por este barrio. Nos quedamos en la plaza de la Puntual, confluencia entre la calle de la Princesa, Assaonadors y Allada-Vermell. Esta última calle es resultado de la unión de dos calles
tras el derribo de las casas que las separaban, una acertada
intervención en un barrio de calles estrechas y sin espacios verdes.
Se ha convertido en calle bonita peatonal y vecinal, que dispone de una interesante oferta cultural y de ocio. Los sábados hay una feria de artesanía.
Otra curiosidad: la película de Almodóvar, Todo sobre mi madre, rodó aquí algunas de sus escenas.
Seguimos el trayecto por la calle Assaonadors, que toma nombre del gremio que integraba a los artesanos que se dedicaban a trata la piel y el cuero.
En el nº 10 de esta calle me llama la
atención una tienda de aire antiguo que se dedica a la venta de viejos
carteles, alguno de los cuales resulta hoy en día curioso.
En los
números 2-8 de esta calle se encuentra una mansión señorial, la casa Puigxuriguer, también conocida como
Casa de la Custodia, de 1550, aunque fue ampliada y reformada en los siglos XVIII y XIX.
Conserva
tres ventanales góticos ornamentados con pequeñas cabezas.
En el patio de esta casa (por la calle Montcada), se encuentra el “Museo del Mamut”, un pequeño y curioso museo privado donde
podemos encontrar restos paleontológicos.
Y
volvemos a encontrarnos con la Capilla Marcús. En la esquina nos saluda una
hornacina con una imagen de San Juan Evangelista. Es la
casa del gremio de curtidores, un edificio del siglo XVII y posteriormente
reformado.
Tomamos la
calle Princesa. Según
dicen, esta calle se abrió para que el ejército, situado en la Ciudadela,
tuviera un acceso más rápido y directo al centro de la ciudad. Las obras
empezaron en 1882, derribando los edificios que se encontraban a su paso. Se proyectó como la primera calle adoquinada y para realizar la obra se hicieron venir obreros especialistas de Bélgica. Fue
abierta en 1892 y se consideró entonces extremadamente ancha. El nombre escogido fue Princesa de Asturias en honor a la futura reina de España, pero al nacer Alfonso XII y quedar resuelto el problema de sucesión, la calle paso a llamarse simplemente Princesa.
En esta calle nos
encontramos con el Palau Gomis, originario de siglo XVI pero muy
reformado en los siglos XVIII y XIX, que alberga el Museo Europeo de Arte
Moderno.
Aunque nos
desviamos un poco de nuestra ruta, avanzamos por la calle Princesa, hasta el nº
11, para ver otra tienda: el rey de la magia. Fundada en 1881 es todo un
referente; es tienda de productos de magia, escuela, museo y teatro.
Volvemos
hacia atrás y tomamos la calle Barra de
Ferro para entrar en el Museo Europeo de Arte Moderno, un centro dedicado a la
promoción y la difusión del arte figurativo del siglo XX y XXI.
Es un museo
privado, pero merece la pena, especialmente si no os gusta el arte abstracto.
Aquí os dejo algunas imágenes para que juzguéis por vosotros mismos.