Generalmente, cuando hablo de la ciudad y sus edificios, hago referencia principalmente a los históricos, escondiendo la Barcelona moderna. Esto puede dar la idea equivocada de es una ciudad anclada en el pasado, cuando la realidad es muy distinta. Voy a aprovechar la apertura del nuevo Museo del Diseño (del que hablaré en un próximo post) para hablar de una zona de la ciudad que en los últimos años se ha convertido en el proyecto de transformación urbanística más importante de los últimos años: Glorias y el distrito 22@, en el barrio de Sant Martí.
El entorno empezó a cambiar en 1995 con la creación del Centro Comercial Glorias y el Centro Cultural La Farinera del Clot.
También se mejoró la urbanización de la Diagonal, se construyeron hoteles, edificios de oficinas y viviendas, y se instaló el Trambaix (tranvía) en 2004.
En 2005 se inauguró la Torre Agbar, que ya forma parte del skyline barcelonés. Es el rascacielos más famoso de la ciudad, tanto por su particular forma cilíndrica como por su juego de luces nocturnas.
La Torre Agbar
Diseñado por Jean Nouvel, la Torre está formada por 38 plantas de las cuales 34 están sobre la superficie y 4 por debajo del suelo. En total mide 142 metros de altura.
Actualmente es un edificio de oficinas, aunque según parece pronto será un hotel. Tiene 4500 ventanas y toda la fachada exterior actúa como un gran muro cortina hecho de láminas de cristal que recubren el edificio. En él se reflejan los colores del Mediterráneo; está cubierto por láminas en forma de persiana graduables con fondo de distintos colores: en la parte inferior los más cálidos, como el rojo, que poco a poco se van enfriando hacia el azul y el blanco en lo alto.
Por la noche, sus más de 4.500 dispositivos luminosos producen un juego de luces de colores a lo largo de toda la fachada que son todo un espectáculo nocturno.
Junto a la torre se sitúa el distrito 22@, que se creó para transformar el barrio del Poblenou, una zona que durante más de un siglo ha tenido una gran actividad industrial. Todavía se pueden algunas de las viejas fábricas de ladrillo visto, llenas de personalidad, adaptadas a nuevos usos y que los arquitectos integran en las nuevas construcciones.
C. Perú, 52. Can Jaumandreu, antigua fábrica “Vapor de la Llana”, edificio de 1870 |
Su chimenea está incorporada en el catálogo de patrimonio arquitectónico de la ciudad. |
Esta zona actualmente evoluciona hacia el sector de las TIC, la innovación y el diseño. El proyecto fomenta el agrupamiento de empresas de alto valor tecnológico, e instituciones, administraciones públicas, centros de investigación y universidades a esta zona, para compartir conocimiento y actividades.
Edificio
de Mediapro. Avenida Diagonal, 177
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Uno de estos sectores económicos emergentes es el sector del audiovisual, uno de los sectores más influyentes y con más posibilidades de crecimiento futuro. De esta idea surge el Parque Barcelona Media, en colaboración entre el Ayuntamiento, el Grupo Mediapro y la Universidad Pompeu Fabra.
Ubicado en el solar de la antigua fábrica textil de Ca l’Aranyó, El Parque está concebido como un gran complejo multidisciplinario donde confluyen iniciativas de divulgación, producción y formación del sector audiovisual.
Detrás de este recinto (calle Bolivia 56), destaca el edificio CMT, diseño Battle & Roig Architects e inaugurado en 2010. El edificio se llama así por ser la sede de la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones.
Se construyó bajo la antigua estructura de la fábrica textil de Can Tiana, de la que se conserva su estructura original. Se han restaurado las paredes de ladrillo, manteniendo la estructura vista. La fachada está protegida mediante un sistema de lamas horizontales que continúa a lo largo de la antigua fábrica, conectando los dos volúmenes.
Es un edificio asimétrico, que aumenta su volumen en relación con el eje de la calle y cuya apariencia cambia radicalmente con cada paso alrededor de su exterior. Visto desde la distancia puede apreciarse su interior, pero a medida que te acercas pierde ligereza y se transforma en seriedad.
Junto a la torre Agbar encontramos dos hoteles. Por un lado el Hotel Novotel Barcelona City, un moderno hotel de cuatro estrellas que disfruta de grandes vistas sobre la ciudad.
Hotel Novotel. Avenida Diagonal 201
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El segundo es el Hotel Silken Diagonal Barcelona, edificio inaugurado en 2004 y obra del arquitecto barcelonés Juli Capella.
Hotel Silken Diagonal. Avinguda Diagonal, 205 |
¿Cómo ha de ser un edificio situado al lado de un espacio tan especial y colorido como la torre Agbar? Pues evitando cualquier confusión creando un espacio totalmente distinto: formas rectas frente a las curvas de la torre y contrastes en blanco y negro frente al cromatismo.
La fachada es un prisma de cristal negro sobre el que destacan unos voladizos verticales de piedra blanca. De frente, las piezas blancas parecen que tengan la misma profundidad que el fondo, pero cuando los ves desde otra perspectiva, puedes ver su grosor sobresaliendo, superpuestas.
En 2013 se acabó el edificio Museo del Diseño-DHUB y en 2014 le tocó el turno a los nuevos Encants Vells, pero eso será en una próxima entrada.
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